Los camiones saleros, o mejor dicho, la aplicación de un revestimiento anticorrosivo a los camiones que transportan mariscos, es una solución importante para proteger el vehículo de los efectos de la sal marina y la humedad. El transporte de mariscos requiere un entorno de almacenamiento especial, pero también hace que el vehículo sea susceptible a la oxidación y los daños. Este artículo analiza por qué es necesario aplicar un revestimiento anticorrosivo a los camiones que transportan mariscos y qué áreas deben tener prioridad.
¿Por Qué los Camiones de Mariscos Necesitan Revestimiento Anti-Óxido?
El ambiente húmedo y la exposición frecuente a la sal marina son las principales causas de corrosión en los camiones que transportan mariscos.
Entorno de Alta Exposición a la Sal y la Humedad
Los camiones grandes que transportan mariscos a menudo usan sistemas de refrigeración para preservar los productos. El agua del hielo derretido se acumula en las grietas de la carrocería del camión y, combinada con la sal marina que se adhiere del ambiente exterior, crea las condiciones ideales para la corrosión y la oxidación.
Hielo derritiéndose en la caja de un camión de transporte de mariscos.
Para los camiones de mariscos pequeños y medianos, el uso de sal de roca para mantener frescos los productos también es una causa de oxidación. Aunque la sal ralentiza la fusión del hielo, también corroe los componentes de la carrocería del camión.
Carreteras Costeras con Alto Contenido de Sal
Además, muchas rutas de transporte de mariscos se encuentran a lo largo de la costa. El aire aquí contiene pequeñas partículas de sal de las olas del mar, que se adhieren al vehículo y provocan corrosión con el tiempo. El viaje frecuente por estas rutas costeras hace que los camiones sean aún más vulnerables a la sal marina.
Camión de transporte de mariscos circulando por una carretera costera.
Ubicaciones que Necesitan Revestimiento Anti-Óxido en Camiones Saleros
Para proteger los camiones saleros de la corrosión, es necesario enfocarse en aplicar un revestimiento anti-óxido en las siguientes ubicaciones:
Chasis
El chasis es la parte que está en contacto directo con el agua de mar, las rocas, el polvo y otros agentes corrosivos. Cubrir el chasis del camión con pinturas o materiales antioxidantes ayudará a proteger esta parte de los daños.
Vista inferior del chasis de un camión de transporte, mostrando posibles puntos de corrosión.
Carrocería
La carrocería es donde se almacenan los mariscos, en contacto directo con el agua salada, el hielo y los desechos orgánicos. Es esencial aplicar un revestimiento anticorrosivo a la carrocería, especialmente a las soldaduras y grietas.
Interior de la caja de un camión de transporte de mariscos.
Suelo de la Cabina
El suelo de la cabina también puede verse afectado por la humedad y la sal que traen los zapatos del conductor. Cubrir el suelo de la cabina con un revestimiento anticorrosivo ayuda a prolongar la vida útil del vehículo y a mantenerlo limpio.
Suelo de la cabina de un camión mostrando signos de desgaste.
Cubrir con revestimiento anticorrosivo un camión salero es una medida de protección necesaria que ayuda a prolongar la vida útil del vehículo, reducir los costes de reparación y mantenimiento y, al mismo tiempo, garantizar la seguridad durante el transporte. El revestimiento anticorrosivo protegerá el vehículo de los efectos de la sal, minimizando la oxidación y los daños, ayudando al vehículo a funcionar de forma más estable y eficiente.
