El caso del camionero Hà Văn Mến (50 años, residente en Quế Sơn, Quảng Nam), detenido provisionalmente el 25 de diciembre por la Policía de Investigación de la ciudad de Điện Bàn, ha captado la atención pública. Mến está acusado de «resistirse a funcionarios públicos» según el Artículo 330 del Código Penal, tras conducir su camión y resistirse a la policía de tráfico (CSGT). Este incidente vuelve a poner de manifiesto la falta de conciencia sobre las normas de tráfico por parte de algunos camioneros, especialmente en rutas de larga distancia.
Alrededor de las 14:00 horas del 22 de diciembre, Mến conducía un camión de 16 toneladas en la ruta ĐT 603B, a través de la sala Điện Ngọc, en dirección a Hội An desde Đà Nẵng. Esta es una ruta costera con señales que prohíben camiones de más de 5 toneladas. La patrulla de CSGT de la ciudad de Điện Bàn le indicó que se detuviera para una inspección debido a una infracción detectada. El camión infractor era de gran tamaño, con más de 9 metros de largo y 2,5 metros de ancho.
Según la acusación de las autoridades, el conductor Mến no solo no obedeció la orden de detenerse, sino que aceleró y huyó, a pesar de la persecución de la CSGT. Durante la persecución, Mến realizó maniobras evasivas continuas, conduciendo hacia el carril contrario, poniendo en peligro a otros vehículos. Cuando la CSGT bloqueó el frente del camión, el conductor continuó retrocediendo para escapar, causando congestión de tráfico en la ruta.
Después de más de 1 km de persecución, en la calle Trường Sa, sala Hòa Hải, distrito de Ngũ Hành Sơn, ciudad de Đà Nẵng, las autoridades lograron detener el camión infractor. Tras la inspección, Mến no pudo presentar su permiso de conducir según lo requerido.
Por sus acciones, Mến fue multado por las siguientes infracciones: conducir por una vía con señales de prohibición para el tipo de vehículo que conducía; no obedecer las órdenes de un controlador de tráfico; conducir sin permiso de conducir. El vehículo infractor también fue incautado para fines de investigación.
En la comisaría, Mến admitió su infracción. Este incidente no es solo una simple infracción de tráfico, sino que también muestra una actitud de desprecio por la ley y resistencia a los funcionarios públicos por parte del conductor. Tales acciones no solo ponen en peligro al propio conductor y a otros, sino que también sientan un mal precedente en la comunidad de camioneros de larga distancia.